El mejor fondo de renta fija para capear el temporal

Redacción Mapfre
Ignacio Amo, experto en análisis y selección de fondos de MAPFRE Inversión, examina, en el consultorio organizado por Finect, las complicaciones actuales del mercado de renta fija en un entorno económico incierto, acentuado por factores geopolíticos.
Destaca que el 2025 se está caracterizando por una gran incertidumbre en los mercados de renta fija. Esta situación ha incrementado las dudas entre los inversores, lo que exige una gestión más activa y flexible. “La incertidumbre proviene de eventos geopolíticos y decisiones políticas que complican las previsiones de crecimiento y tipos de interés, afectando la rentabilidad de los activos de renta fija”, añade.
Durante la entrevista, Ignacio menciona que las políticas arancelarias implementadas desde el "Liberation Day" han alterado las previsiones de crecimiento y han supuesto un cambio de engranajes a nivel global. Por ejemplo, las expectativas de crecimiento del PIB de EE. UU. se han ajustado de un 2.2% a un 1.4%, indicando una desaceleración significativa, aunque en ningún momento hablamos de recesión. “Estos cambios obligan a los inversores a reevaluar sus estrategias en renta fija ante los retos económicos globales”, explica.
Además, según el experto, la liquidez del mercado, entendida como la facilidad de acceso a financiación, es un indicador clave a valorar para entender el apetito del mercado. El índice de condiciones financieras es una buena forma de medirlo y nos dice que, a pesar de que los bancos centrales han ido reduciendo su balance, la liquidez sigue presente en el mercado lo que es un buen síntoma.
Por otro lado, los beneficios empresariales en EEUU están creciendo a doble dígito, lo cual refleja que las empresas americanas no se han visto todavía afectadas por las políticas arancelarias, aunque habrá que ver en los siguientes trimestres. Sin embargo, en Europa, los beneficios sí están estancados para este 2025, aunque con mejor perspectiva para el 2026.
Los últimos meses hemos visto mucha volatilidad en los rendimientos de los bonos gubernamentales en el contexto del ruido arancelario, llegando a ver el Treasury a 30 años por encima del 5%. Vimos como Moody’s rebajaba la calidad crediticia a EEUU en un contexto en el que, además, EEUU tiene que refinanciar gran cantidad de deuda emitida en tiempos de COVID, a tipos mucho menos atractivos, lo cual está suscitando dudas en el mercado. Por otro lado, los diferenciales de crédito se han ampliado debido a la incertidumbre, presentando oportunidades para los inversores. “Aunque no están en sus niveles más amplios, la situación actual ofrece oportunidades, especialmente en un contexto de bajas tasas de default”, justifica.
En el momento actual, vemos la renta fija como una fuente de cupón, más que de revalorización de precios y, a nivel de duración, nos situamos en los tramos intermedios de la curva. Las curvas se han ido desinvirtiendo a lo largo del 2024 y 2025, y los tramos más cortos han ido perdiendo algo de su atractivo progresivamente, por lo que empieza a tener más sentido aumentar ligeramente la duración. Dicho esto, consideramos que hay oportunidades a través de fondos con algo más de duración que los de perfil monetario, ideas selectivas dentro del crédito como lo pueden ser las titulizaciones europeas y estadounidenses y, sobre todo, fondos activos y flexibles que aprovechen oportunidades adaptando la cartera y duraciones de la misma.
En este contexto, Amo menciona varios fondos atractivos, como es el caso del Fondmapfre Ahorro, un fondo de renta fija diversificada a corto plazo que busca ofrecer una TIR atractiva con duraciones controladas, lo que reduce la volatilidad. “Este enfoque en fondos flexibles y con gestión activa es crucial para navegar en un entorno de alta incertidumbre y volatilidad en los mercados de renta fija”, concluye.
Puedes ver el vídeo completo aquí: https://www.youtube.com/watch?v=A7kcVBPhbiA